Marketing digital

Una de las estrategias que más rápidamente se plantean las empresas, de cara a la promoción de su marca o actividad, es entrar a formar parte de la inmensa red de comunidades virtuales que existen. Sin embargo, a pesar de que internet está plagado de consejos de cara a optimizar los resultados de la presencia en dichas redessociales, aún son muchas las empresas que no tienen en cuenta determinados factores y comenten más errores de los necesarios, por lo que entonces consideran que su presencia en estas comunidades no tiene mucho sentido.


Veamos qué maniobras realmente dan resultado, a tenor de resaltar las que ciertamente no consiguen los objetivos previstos.
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- Entrar en las redes sociales porque “todo el mundo está en ellas”, primer error. Bien, aunque esta afirmación tiene cierto sentido, es decir, se acude a un medio en el que es posible encontrar clientes potenciales para nuestro negocio de entre un gran volumen de usuarios, lo erróneo es hacerlo sin saber realmente qué buscamos y qué queremos obtener, es decir, sin trazarse unos objetivos claros. Cada empresa, dentro de la estrategia establecida, dirige su promoción en función de determinados elementos: lanzamiento de un producto, inauguración de una sucursal, liquidaciones, periodos de ofertas, apertura del nuevo Departamento de atención al cliente, etc. La red social no funciona diferente, debemos recalcar en lo que queremos promocionarnos, todo lo demás es perder el tiempo y no ganar clientes.


- En las empresas se establecen relaciones con muchas personas y/entidades. Existe un lenguaje específico de este ámbito, y que se utiliza por igual, tanto con clientes como con proveedores, negocios filiales, etc. Trasladar este lenguaje a las redes sociales es un tremendo error. En el entorno de las redes sociales debe establecerse un estilo coloquial, que genere confianza y seguridad. Seguir utilizando un lenguaje corporativo, está comprobado, crea indecisiones de compra.


- Dentro del apartado de la comunicación, tan importante es cómo decimos las cosas (lenguaje coloquial y amistoso) como lo que decimos. Es un error muy frecuente lanzar mensajes demasiado planos y pensar que por el mero hecho de estar publicado en una red social creará expectación y será un marketing viral positivo. Hay que apostar por una comunicación atrayente, de contenido que sea capaz de captar la atención y resultar interesante. Si repetimos insistentemente el mismo estilo insustancial en nuestra forma de comunicarnos daremos una imagen equivocada, al estar difundiendo una imagen poco interesante de cara a lo que realmente buscamos, un consumidor o cliente de nuestra marca, por no citar el hecho de que será poco compartida por otros usuarios, por lo que la propagación de nuestra marca no se realizará como es debido.


- Cuando se comienza a introducir un negocio o marca en las redes sociales es necesario saber que existen unos plazos  mínimos para conocer el impacto real que este medio ha supuesto para nuestra marca o actividad. Creer que esta estrategia nos dará resultados en unos pocos meses en el principal error que puede cometerse, y el motivo de muchos de los abandonos o de que descienda la presencia en comunidades virtuales. Hay que aprender a ver las redes sociales como un complemento a todo nuestro marketing promocional y no como el único sistema funcional y que resulta efectivo.


- Plantearse, como empresa, iniciar el recorrido en redes sociales es un buen comienzo, pero el error está en pensar que todo el mundo está preparado para hacerlo y que esto puede hacerse sin invertir en los recursos necesarios. Por mucho que se quieran ahorrar costes, desarrollar una estrategia equivocada puede acarrear pérdidas, en tiempo y en productividad. Lo ideal es recurrir a empresas especializadas, que poseen personal experto con amplios conocimientos en la materia y establecerán la oportuna y correcta estrategia encaminada a promocionarnos en la mejor plataforma, y nos dirigirán hacia el cliente que buscamos.


- Utilizar todos los medios posibles para la promoción puede ser efectivo, aunque no siempre, extrapolarlo a las redes sociales es exactamente igual. Querer tener presencia en las redes sociales no significa necesariamente utilizar todas, o centrarse únicamente en las más populares: Twitter y Facebook. Nuestra marca o negocio puede tener presencia en otras comunidades en donde encontremos un consumidor concreto y que se defina en nuestro perfil. Por ello, una vez más, insistimos en la necesidad de contar con profesionales, que estudiarán nuestro caso y dirigirán nuestras campañas de forma precisa.

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Marketing digital

Redes sociales y evolución del ser humano

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Existe una total e indivisible relación entre la evolución de la economía como protagonista indiscutible de los últimos tres años y el nuevo modelo productivo basado en la eficiencia, el reparto de recursos y la recuperación de variables como servicio al cliente, fidelidad, confianza, calidad, compromiso, reputación  y satisfacción de necesidades.



El capitalismo y su más poderoso protagonista; el enriquecimiento rápido sin valor agregado fomenta el consumo sin límites, creando necesidades irreales que esclavizan al ser humano y le llevan al aislamiento.


La toma de conciencia con una realidad basada en la austeridad, en lugar de la explosión constante de la prosperidad ficticia del crédito, ha llevado a los seres humanos a experimentar nuevamente la necesidad de retrotraerse a los tiempos ancestrales, en los que las personas se organizaban en comunidades a través de las cuales lograban satisfacer sus necesidades grupales y sociales.


Sin ninguna duda los ciclos, por su propia naturaleza, se repiten y únicamente varía el escenario que los acompaña, la nueva economía se centra en la productividad eficiente y la toma de conciencia con la necesidad que tienen los seres humanos de confiar y compartir.


A diferencia del modelo productivo anterior en el que el agotamiento se produce por un abuso del enriquecimiento individual basado en la especulación y la falta de eficiencia, el modelo productivo que se desarrolla a través de las nuevas tecnologías tiene la capacidad única de atender a las emociones y de vislumbrar el éxito a través de conceptos como la confianza y la reputación.


Estar presente en los primeros puestos de los criterios de búsqueda de los consumidores no es sólo una variable más dentro del plan de empresa, es un ejercicio de compromiso conjunto de comunidad, a través del cual los usuarios de Internet apuestan por el crecimiento ilimitado de la información, de la formación y de la prestación de bienes y servicios con el valor agregado de la calidad, única para cada ser humano, así como el fortalecimiento del lazo de los valores como fórmula eficiente en el camino hacia el éxito.


La asociación en comunidades es por lo tanto, una forma de optimizar los recursos, de crear y consolidar tendencias y necesidades y proviene de la necesidad de los seres humanos de salir del ostracismo y el individualismo de la especulación y el consumo indiscriminado al margen de las necesidades y el reparto eficiente de recursos.


El nuevo modelo productivo es en definitiva una consecuencia de un ciclo en el que todos los sistemas experimentaron el agotamiento de los recursos y hoy, es necesario implantar un nuevo orden social en el que todas las variables interactúen así, socialmente, en comunidad, honestamente y con la conciencia de lograr la eficiencia, la productividad y el compromiso.


Las redes sociales expanden sus tentáculos tal y como lo hicieron en su fase inicial cuando pasaron de ser un instrumento que comunicaba a personas entre sí en entornos restringidos a plataformas eminentemente empresariales y, de forma progresiva y muy de prisa, se van consolidando como un nuevo orden social, una nueva forma de convivencia y de organización en comunidades que intercambian necesidades.


Internet en su conjunto y al contrario de lo que piensan los detractores del conocido mundo virtual, tiene la capacidad de integrar cualidades, ideas, aptitudes e innovación, creando un orden social tan dinámico que impide el establecimiento de un freno en el desarrollo.


La constancia, la perseverancia, la activación de las emociones en conjunto con la asimilación de nuevos conceptos y tendencias hace de Internet y las redes sociales un instrumento evolutivo histórico en la historia de la humanidad, mucho más poderosos y con capacidad de cambio que la anterior revolución cultural que impuso Gutemberg con la creación de la imprenta de tipos móviles.


Si somos capaces de descubrir sus virtudes, sin pensar que el conocimiento de las variables estadísticas que determinan las palabras clave de una estrategia SEO; o los parámetros que determinan el éxito de una estrategia de marketing, son suficientes para triunfar, si nos centramos en el desarrollo del modelo productivo y asumimos que la eficiencia, la productividad, la constancia, perseverancia y reputación, son en sí mismo el mejor valor agregado que podamos aportar a nuestra “comunidad” lograremos iniciar definitivamente una nueva era en la que la producción de bienes y servicios sea un trabajo conjunto y no un área específica destinada a los grandes capitales y la especulación.
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